Marzo – El mes de la transformación
Neusa MateusEl mes 3 trae consigo un poderoso simbolismo en las Escrituras.
Fue “al tercer mes después que los hijos de Israel salieron de la tierra de Egipto” , que llegaron al desierto de Sinaí, y allí Dios hizo un pacto con su pueblo, dándoles la Ley y estableciendo una nueva etapa en su camino (Éxodo 19:1).
Fue también en el tercer mes que, en tiempos del rey Ezequías, el pueblo trajo ofrendas voluntarias al Señor “y las ofrendas comenzaron a acumularse en el mes tercero” , señal de renovación y provisión divina (2 Crónicas 31:7).
Para mí marzo es más que un mes en el calendario. Fue en marzo que bajé a las aguas e hice mi pacto con Cristo. El mes en que le entregué todo y renací a una nueva vida.
Así como Dios marcó el tercer mes con momentos de cambio y renovación, que marzo sea siempre un recordatorio de que “he aquí, yo hago nuevas todas las cosas” (Apocalipsis 21:5).
Gracias Dios, Gracias Señor Jesús, Gracias Espíritu Santo.
¡Amén!